Cuando el bosque se cruza en tu camino: qué hacer si atropellas a un animal salvaje
Con el aire fresco y los atardeceres tempranos del otoño, los animales salvajes resultan cada vez más difíciles de distinguir en la carretera. La policía insiste en que los conductores permanezcan atentos, sobre todo en tramos flanqueados por bosques o matorrales densos, donde los animales pueden aparecer de forma repentina y sin previo aviso.
La fauna suele desplazarse en grupo y su comportamiento es imprevisible, por lo que extremar la precaución en zonas arboladas es fundamental. Presta especial atención a las señales que advierten de pasos de animales: no son simples formalidades, sino que se colocan en lugares donde los incidentes son frecuentes.
Si atropellas a un animal salvaje, nunca abandones el lugar. La ley considera este hecho como un accidente de tráfico. Igualmente importante, no te lleves al animal, esté herido o muerto.
Si el accidente provoca heridos o deja tu vehículo inutilizado, debes avisar a la policía de inmediato. Incluso si no hay personas afectadas y el coche sigue funcionando, es obligatorio informar a las autoridades si el animal ha resultado muerto o herido.
Si encuentras un animal ya tendido en la carretera, comunícalo cuanto antes. Avisar con rapidez ayuda a evitar nuevos accidentes y protege al resto de usuarios de la vía.
En la penumbra otoñal, la frontera entre el bosque y el asfalto se difumina. Un instante de atención puede marcar la diferencia entre un susto y una tragedia.
