
Sunbird: Energía de fusión para conquistar las estrellas
En el núcleo del concepto se encuentra el Dual Direct Fusion Drive (DDFD) de Pulsar Fusion, un sistema de propulsión diseñado para combinar alta eficiencia y versatilidad. A diferencia de los motores convencionales, no solo genera empuje, sino también hasta 2 megavatios de energía eléctrica para los sistemas a bordo. Las cifras impresionan: un impulso específico de entre 10.000 y 15.000 segundos, muy por encima de lo que pueden ofrecer los sistemas de propulsión químicos o incluso los basados en fisión nuclear. En la práctica, esto se traduce en un consumo de combustible mucho menor, velocidades superiores y la capacidad de lanzar cargas más pesadas hacia el espacio profundo.
El Sunbird se concibe como un auténtico vehículo de migración, capaz de transportar tripulaciones y equipos por el sistema solar en plazos hoy impensables. Un viaje a Marte, que actualmente requiere varios meses, podría acortarse de forma drástica. Esa eficiencia permitiría además destinar más espacio a instrumentos científicos o sistemas de soporte vital, aspectos clave para misiones de larga duración.
Pulsar Fusion ha ampliado sus operaciones a Estados Unidos, estableciéndose en Texas mientras busca socios para acelerar el desarrollo. Por ahora, el Sunbird se encuentra en una fase inicial, con importantes retos técnicos aún por delante. Sin embargo, la idea ya ha despertado interés en toda la industria espacial, donde la propulsión por fusión se considera desde hace tiempo el santo grial de los viajes interestelares.
Si la tecnología demuestra ser práctica y segura, el Sunbird podría inaugurar una nueva era en la exploración espacial, en la que los viajes a Marte, asteroides o destinos aún más lejanos dejarían de ser un sueño remoto para convertirse en una posibilidad cercana.