El Porsche Taycan Turbo GT se corona en Interlagos

Cuando Porsche se propone romper un récord, no se conforma con apenas cruzar la línea de meta; irrumpe como un corcel desbocado, con la melena al viento, dejando todo atrás. Y eso es precisamente lo que logró el Taycan Turbo GT con el paquete Weissach y los neumáticos Pirelli Trofeo RS, pulverizando el récord de vuelta de coches eléctricos en Interlagos con un impresionante 1:42.1. No solo superó al anterior Taycan en unos cuantos segundos, sino que fue alucinantemente ocho segundos más rápido. Y quizás aún más sorprendente: dejó atrás al 911 Turbo S.

Felipe Nasr, el hombre al volante, quedó igualmente asombrado: "Esperaba una aceleración y un par motor potentes, pero este coche se adhirió a la pista y despegó como un cohete." Dirección precisa, equilibrio impecable, estabilidad inquebrantable al frenar: esto no es solo un vehículo eléctrico, es una auténtica máquina de carreras.

Y esto está lejos de ser la única hazaña del Taycan. ¿Nürburgring? Conquistado con un tiempo de 7:07.55, ¡26 segundos más rápido que su predecesor! ¿Laguna Seca? Dominado. ¿Derrape en hielo? Por supuesto—el Taycan se deslizó 10.87 millas de lado porque, bueno, ¿por qué no?

El mensaje de Porsche es contundente: los coches eléctricos ya no son solo juguetes inofensivos para los ecologistas. Son más rápidos, más salvajes y, sí, incluso pueden darle rivalidad al 911. Si el futuro es eléctrico, Porsche tiene la intención de llegar primero y a toda velocidad.