











Opel Mokka GSE: Un Toque de Velocidad para el Crossover Urbano
Opel ha presentado oficialmente su esperado Mokka GSE, convertido ahora en el Opel eléctrico de producción en serie más rápido hasta la fecha. Y no es un simple título: lo ha conseguido por méritos propios, gracias a unas prestaciones sorprendentes. Sus 280 caballos de potencia, 345 Nm de par y una aceleración de 0 a 100 km/h en solo 5,9 segundos demuestran que no se trata solo de un crossover con enchufe, sino de una declaración de intenciones: incluso los SUV eléctricos compactos pueden soñar con el circuito.
Bajo su carrocería esculpida, encontramos una batería de 54 kWh que alimenta las ruedas delanteras mediante un diferencial autoblocante Torsen. Los amortiguadores provienen de un prototipo de competición y todo el sistema de alto voltaje, incluido el motor y el inversor, tiene su origen en la división de competición de Opel. ¿El resultado? Un coche por debajo de 1,6 toneladas, ágil y preciso en curva.
En el apartado estético, el Mokka GSE no pasa desapercibido: alerones, llantas de 20 pulgadas calzadas con neumáticos Michelin, pinzas de freno amarillas y logotipos GSE por doquier. Los detalles en negro y amarillo recuerdan más a la moda urbana que a un uniforme escolar. El interior refuerza esa personalidad deportiva con tapicería de Alcántara, volante específico y asientos envolventes.
El conductor puede elegir entre tres modos de conducción: Sport libera todo el potencial, Normal limita la velocidad máxima a 180 km/h y Eco doma el conjunto para priorizar autonomía y eficiencia. Tres caras para un mismo coche, aunque la verdadera esencia aparece al pisar a fondo el acelerador.
El Mokka GSE es una propuesta tan ambiciosa como singular: un crossover urbano con el alma y la puesta a punto de un deportivo. Queda por ver si esta fórmula conquista a un público amplio o se queda en un nicho. Pero lo que ya está claro es que Opel no se conforma con ser la opción sensata: ahora quiere ponerte el pulso a mil.