De los aspiradores a la velocidad: Dreame, la marca china que promete un hipercoche rival de Bugatti
Dreame no piensa en pequeño. La compañía asegura que su próximo buque insignia "redefinirá el segmento de los hiperdeportivos", combinando niveles inéditos de rendimiento eléctrico con una experiencia de usuario adaptativa basada en inteligencia artificial e integración total con dispositivos inteligentes y hogares conectados. Entre sus promesas más audaces figura el intento de lograr el título de coche de producción más rápido del mundo.
Para respaldar sus palabras, Dreame ha creado una división automovilística propia con cerca de mil especialistas, procedentes tanto de la industria del automóvil como de sectores tecnológicos punteros. El núcleo del proyecto es un motor eléctrico desarrollado internamente, capaz de alcanzar supuestamente las 200.000 revoluciones por minuto, varias veces más que los vehículos eléctricos convencionales actuales.
Los sistemas a bordo estarán basados en inteligencia artificial y podrán comunicarse con el conductor en lenguaje natural. Según Dreame, el coche no solo ejecutará órdenes, sino que aprenderá de los hábitos de su propietario y se adaptará a ellos. El objetivo es crear una máquina que sea tanto un escaparate tecnológico como un símbolo de estatus inconfundible. Como detalle distintivo, los compradores recibirán también uno de los aspiradores de la marca junto a su coche de varios millones de euros.
Si Dreame logrará realmente rivalizar con Bugatti o si esta visión quedará en una fantasía electrónica se sabrá en unos años. Sin embargo, por ambición, alcance y atrevimiento, el primer paso ya resulta extraordinario.