BYD alcanza los 13 millones de vehículos eléctricos: ¿hito real o pura destreza industrial?
BYD, el mayor fabricante mundial de vehículos electrificados (NEV), se ha convertido en el primer constructor en superar la barrera de los 13 millones de unidades producidas. El vehículo que marcó este récord, un U7 de su marca de lujo YANGWANG, salió de la línea de montaje en China el 21 de julio, simbolizando no solo un logro empresarial, sino también una tendencia global hacia la electrificación a gran escala.
A BYD le llevó 13 años fabricar sus primeros 10 millones de NEV. ¿El salto de 10 a 13 millones? Apenas ocho meses. Eso dice mucho sobre la magnitud de China y la implacable eficiencia de su integración vertical. A diferencia de muchos competidores, BYD produce internamente baterías, semiconductores, motores y controladores, manteniendo el control absoluto de su cadena de suministro.
Solo en la primera mitad de 2025, BYD vendió más de 2,14 millones de NEV, de los cuales 470.000 se comercializaron fuera de China, un incremento interanual del 128,5%. Sin embargo, la mayor parte del impulso de la marca sigue estando en su mercado local, donde subvenciones estatales e incentivos políticos crean un ecosistema prácticamente favorable de manera artificial.
La estrategia de BYD no seduce por el diseño, sino por una racionalidad ingenieril incansable: máxima eficiencia, mínima complicación. Sus baterías Blade, conocidas por ser resistentes al fuego y de gran durabilidad, reflejan esa visión técnica, aunque los clientes del segmento premium siguen exigiendo algo más que cifras de ciclos.
En resumen, BYD produce mientras otros todavía planifican. Pero, ¿equivalen 13 millones de coches a 13 millones de clientes satisfechos, o simplemente a que BYD ha perfeccionado el arte industrial de la producción en masa, relegando al comprador a elegir solo el precio y el color?
