
¿El asesino de Tesla de Rusia? ¡Claro, justo después del Lada volador!
Se podría suponer que cuando el buque insignia de la industria de defensa de Rusia se enfoca en desarrollar un SUV eléctrico, el resultado sería algo sacado directamente de Volver al Futuro. Pero no. En su lugar, lo que tenemos aquí es una tragicomedia tecnológica clásica a la rusa: un proyecto grandioso que se lanzó con gran alboroto, solo para ser discretamente marcado con la etiqueta ya conocida de "Suspendido Temporalmente". Lo cual, en realidad, se traduce en que nunca va a suceder.
Se suponía que el E-Neva sería "la respuesta de Rusia a Tesla." Ya sabes, al igual que el Lada Kalina debía ser la respuesta rusa al Volkswagen Golf. En ambos casos, la respuesta ha sido un ensordecedor silencio. El proyecto comenzó con promesas grandiosas: un SUV eléctrico de 435 caballos de fuerza que podría pasar de 0 a 100 km/h en 2.7 segundos, alimentado por una batería supuestamente capaz de llevarte de un campo petrolero a otro sin necesidad de recarga. Todo suena fantástico... hasta que te das cuenta de que el coche tenía tantas posibilidades de materializarse como el regreso de McDonald’s a Rusia.
La producción estaba programada para llevarse a cabo en la antigua fábrica de Toyota en San Petersburgo, con una proyección de 100,000 autos al año. Pero luego, como era de esperarse, la cruda realidad se impuso: simplemente no había dinero. El gobierno se negó a financiarlo, y Almaz-Antey, cuya prioridad en este momento son más los misiles que emular a Musk, decidió que tenía asuntos más urgentes que atender que jugar a ser pioneros de los vehículos eléctricos.
Y así llegamos aquí: otra innovación revolucionaria reducida a un montón de planos y una pila de rublos desperdiciados. ¿La razón oficial? "No es el momento adecuado." Lo cual, dado el estado de la industria automotriz de Rusia – afectada por una escasez crítica de componentes y un aislamiento global – no es nada sorprendente.
¿Habría sido el E-Neva un asesino de Tesla? Las probabilidades eran tan buenas como que Moskvich se convirtiera en una marca de lujo deseada a nivel mundial.