Audi revela su nueva identidad para la Fórmula 1
Audi está a poco más de cien días de debutar en la Fórmula 1 y ya ha mostrado la primera señal de su ambicioso proyecto. El R26 Concept, presentado en la sede de la marca en Múnich, anticipa una visión de diseño que marca el inicio de una era completamente nueva. Audi insiste en dos ideas rectoras: claridad y precisión, cualidades que quiere trasladar del circuito a la carretera.
El director ejecutivo Gernot Döllner define la entrada en la Fórmula 1 como el inicio del siguiente capítulo en la resurrección de Audi. La ambición va mucho más allá de simplemente aparecer en la parrilla. El objetivo es claro: antes de que termine la década, el equipo quiere luchar por el campeonato mundial. Döllner reconoce que nadie construye una escudería de primer nivel de la noche a la mañana, pero asegura que Audi llegará con perseverancia y una cultura de mejora constante.
El R26 Concept adelanta los colores y el lenguaje de diseño que veremos en el primer monoplaza de Audi, cuya presentación está prevista para el invierno. Massimo Frascella explica que la nueva identidad visual crea un hilo conductor en toda la organización. Gráficos mínimos y geometría precisa forman parte de la propia carrocería. La paleta gira en torno al titanio, negro carbono y un nuevo rojo Audi. El programa de competición también utilizará aros rojos que subrayan la presencia global de la marca.
Audi ve la Fórmula 1 como su buque insignia estratégico. Los estrictos límites presupuestarios marcan el terreno, mientras que el potencial de audiencia de la categoría ofrece una plataforma inmejorable para los patrocinadores. La Fórmula 1 llega a cerca de mil millones de telespectadores al año y las valoraciones de los equipos superan los miles de millones de euros. Audi ya cuenta con tres socios principales: adidas, bp y próximamente Revolut como patrocinador principal.
La entrada al campeonato se produjo mediante la compra del grupo suizo Sauber, lo que abrió la puerta a la inversión del fondo soberano de Qatar. El proyecto está supervisado por veteranos de la Fórmula 1 como Mattia Binotto y Jonathan Wheatley. Al volante estarán Nico Hülkenberg y el joven Gabriel Bortoleto, una dupla que combina experiencia y descaro juvenil.
Desde 2022, Audi desarrolla su unidad de potencia en Neuburg. El conjunto integra un V6 turboalimentado de 1,6 litros, un sistema de recuperación de energía, un generador eléctrico y la electrónica de control. La caja de cambios se fabrica internamente y todo el sistema forma una unidad completamente integrada. Las nuevas reglas triplicarán la potencia eléctrica y exigirán combustibles sostenibles. Audi colabora con la británica bp en este aspecto.
La presentación pública completa llegará en invierno, cuando el equipo se muestre al mundo por primera vez. Las pruebas oficiales arrancan en enero en Barcelona a puerta cerrada, seguidas de un traslado a Baréin donde el público verá los nuevos monoplazas. El debut en competición será a principios de marzo en Australia.
La importancia de este capítulo va mucho más allá del espectáculo de la Fórmula 1. La arquitectura del coche, el ritmo de desarrollo y la libertad técnica convierten el proyecto en un laboratorio para los materiales y soluciones que definirán la próxima década. Su influencia llegará a la carretera antes de lo que muchos imaginan.
