El primer SUV eléctrico de Bentley apunta alto y sin excesos
Bentley prepara su primer coche eléctrico y lo hace con una sorprendente moderación. Según la marca, el próximo SUV a baterías no superará el precio de un Bentayga básico. La afirmación viene directamente del jefe de comunicación, Wayne Bruce, quien lo confirmó en una entrevista con Car Expert. Así, Bentley trabaja en un SUV que abre un segmento inédito y acerca el lujo a un público más amplio.
Bruce subraya que el modelo se está diseñando para destacar en tres aspectos: diseño, capacidad técnica y calidad de fabricación. Según él, ningún fabricante de lujo actual ofrece un paquete similar. Es una apuesta ambiciosa, pero Bentley ve un hueco en el mercado de SUV eléctricos de lujo que aún no ha sido cubierto.
El nuevo modelo será más compacto que el Bentayga. Su diseño tomará un rumbo más atrevido, inspirado en el concepto Exp 15 presentado el verano pasado. Bentley quiere alejarse de la silueta tradicional y robusta para explorar una geometría más afilada y moderna, que encaje mejor con una mecánica eléctrica.
Una promesa técnica destaca sobre el resto: el SUV podrá recuperar hasta 160 kilómetros de autonomía en solo 6,5 minutos de carga. Esto sitúa a la marca al nivel de los eléctricos con carga más rápida y deja claro que Bentley busca algo más que opulencia: quiere ofrecer usabilidad diaria respaldada por ingeniería seria.
Se espera que el primer eléctrico de Bentley comparta plataforma con el futuro Porsche Cayenne Electric. Esta arquitectura ya ha demostrado su potencial, con hasta 1156 caballos y aceleraciones de 0 a 100 km/h en 2,5 segundos. Si Bentley aprovecha parte de esa capacidad, el resultado será un SUV que no permitirá que otros se repartan el mercado del lujo eléctrico sin su presencia.
Bentley afirma que el modelo de producción se presentará el año que viene y llegará a los concesionarios en 2026. Su objetivo es establecer un nuevo referente en el segmento eléctrico de lujo, una meta que sus rivales aún persiguen.
Las marcas de lujo ya no ven la electrificación como un futuro lejano. Porsche y Mercedes avanzan en la misma dirección, aunque Bentley parece buscar un nicho donde el precio se mantenga más controlado y el diseño dé un salto más audaz. Puede atraer a compradores cansados de los precios crecientes de los eléctricos de alta gama. La estrategia de Bentley sugiere que el lujo en la era eléctrica puede ser sorprendentemente diverso, incluso cuando la elegancia sigue siendo innegociable.
