Porsche en Rusia: Cayenne y Macan quedan varados
Los propietarios de Porsche en Rusia llevan semanas sumidos en la incertidumbre. Sus coches se niegan a arrancar, se apagan tras pulsar el botón de encendido o muestran una advertencia roja que indica inmovilización del motor. Aunque parece un fallo eléctrico común, la comunidad Porsche sospecha que el origen está en la comunicación satelital. En el canal local Porsche Club Russia, los miembros confirmaron que el problema proviene del módulo de rastreo VTS, que perdió conexión por restricciones y desató el caos en el sistema.
Diversos medios informan que la mayoría de las visitas a talleres involucran a dueños de Cayenne, Macan y Panamera. Las quejas no son nuevas, pero la ola alcanzó su punto máximo este otoño. Un conductor de Macan relató que su modelo 2017 tuvo que ser remolcado al taller y que ese mismo día llegaron otros tres Porsche con los mismos síntomas.
La información inicial apunta a que la avería afecta a vehículos fabricados antes de 2020 equipados con la antigua unidad VTS de GSM y GPS. Este dispositivo se comunicaba con satélites, pero al perder la señal actuó como un guardia paranoico: interpretó la ausencia de conexión como una amenaza y bloqueó el motor.
Algunas publicaciones señalan que el fallo puede sortearse temporalmente desconectando la batería unas diez horas. El módulo VTS se descarga, realiza un reinicio discreto y permite arrancar el coche de nuevo. Los propietarios advierten que este truco solo sirve para llegar al taller más cercano. No existe una solución definitiva.
Volkswagen Group, propietario de Porsche, ya ha declarado que no se responsabiliza del soporte posventa ni del suministro de piezas para los coches vendidos en Rusia. En este contexto, no sorprende que el problema del VTS se haya convertido en el pan de cada día para los dueños.
La situación marca un contraste brutal entre los conductores de Porsche en Europa y los de Rusia. En los mercados occidentales la marca ofrece soporte sólido y parches de software rápidos. En Rusia, esos mecanismos se diluyen cada mes y los fallos eléctricos se vuelven más peligrosos. El episodio demuestra lo frágil que puede ser el lujo en la era digital cuando la red de apoyo se desmorona. Hasta que aparezca una solución oficial y permanente para el sistema VTS, los propietarios de Porsche en Rusia seguirán arrancando sus coches con la tensión de quien juega a la lotería cada mañana.
